Ingreso a la Masonería

Piense bien el paso que quiere dar.

En primer lugar, debe saber que quien pretenda ingresar a la Orden, antes debe deliberar internamente si le conviene participar en trabajos masónicos.

La participación en nuestros trabajos es adecuado para la mayoría de las personas, pero no para todos, ya que es menos probable que sea apropiado para aquellos que nunca cuestionan sus propias palabras y acciones o aquellos que no están dispuestos a escuchar y hacer exigencias recíprocas a sí mismo y a los demás.

La Masonería es una sociedad que espera que los masones den de sí, en lugar de esperar a recibir algo de ella para su beneficio personal.

Desde el punto de vista de la Masonería, el trabajo en logia es adecuado para personas reflexivas que desean desarrollarse y mejorar personalmente.

Algo importante a tener en consideración, es que un masón no tiene permitido pedirle directamente a nadie que se inicie en la Orden. La Masonería no es un club social en donde los masones salgan a buscar nuevos miembros.

El interesado debe tener capacidad intelectual para demostrar su voluntad de ingresar a la orden, porque es muy importante que su decisión sea personal, libre, meditada y no influenciada o condicionada por persona alguna.

Algunas personas que han deseado ser masones, nunca lo fueron por desconocer esta esencia de la masonería, al grado de decir que esperaron en vano sin que los llamáramos después de los primeros contactos.

Si ya ha tomado la decisión de ingresar a la masonería, lo más sencillo es empezar a buscar si en su entorno local, conoce usted a alguien que sea masón y que pertenezca a una logia masónica regular, con grado y capacidad para recomendarlo. En este caso, lo más conveniente es acercarse y demostrar su interés. Tenga la seguridad, que la mayoría de los masones le ayudarán o lo guiarán para encontrar un masón que pueda recomendarlo.

Requisitos indispensables para el ingreso a la Masonería.

Ser varón y tener al menos 18 años de edad.

Capacidad económica para sufragar los derechos de membresía sin afectar la propia o la de su familia.

Ser un hombre libre y de buenas costumbres, sin importar raza, procedencia, credo o condición social.

La creencia en un principio primero, superior, creador, generador o totalizador de todo cuanto existe.

Procedimiento de ingreso a la Masonería.

Cada solicitud de ingreso le sigue un proceso de entrevistas, es decir, varias conversaciones entre el candidato y los miembros de la logia, para determinar si es conveniente su admisión. Esto puede llevar tiempo.

Si el resultado de las entrevistas es positivo, los masones votamos la procedencia de la solicitud.

El resultado de esta votación debe ser unánime: si hubiera un solo voto en contra, el candidato será rechazado. Gracias al proceso meticuloso de entrevistas previas, esto sucede con poca frecuencia.

El que una solicitud requiera de unanimidad, tiene su significado en la propia finalidad de la masonería.

Sería contraproducente admitir a un candidato en contra de quien pudieran existir por parte de algún miembro de la logia, importantes reservas para su admisión. Algo así podría socavar el clima interno de una logia. Además, un recién llegado que no encajase, no sería fácilmente incluido en la atmósfera de confianza fraternal.

Salir de la Masonería.

Ocasionalmente sucede que un miembro decida abandonar la logia después de un tiempo de trabajo, lo cual, puede hacerlo sin ningún problema; la membresía en la masonería es permanente; idealmente de por vida si se comprende correctamente la masonería.

Pero, por supuesto, cada uno puede ir y volver cuando lo desee.

También es raro que un miembro sea excluido en contra su voluntad, por ejemplo, si viola gravemente nuestros principios masónicos. Sin embargo, esto debe ir precedido de un procedimiento legal estrictamente regulado internamente.

Desea más información.

Evíenos un correo con sus datos y sus preguntas sobre la Masonería; tenga la seguridad que se le brindará la información requerida.

Nombre completo